

POR LO TANTO, VAYAN Y HAGAN DISCÍPULOS DE TODAS LAS NACIONES, BAUTIZÁNDOLOS EN EL NOMBRE DEL PADRE Y DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO. ENSEÑEN A LOS NUEVOS DISCÍPULOS A OBEDECER TODOS LOS MANDATOS QUE LES HE DADO. Y TENGAN POR SEGURO ESTO: QUE ESTOY CON USTEDES SIEMPRE, HASTA EL FIN DE LOS TIEMPOS”
Mateo 28:19-20
NTV
Desde el principio, Dios nos llamó a una relación de comunión con Él, aunque el pecado rompió esa comunión, la promesa divina se cumplió en Jesucristo, quien, con su sacrificio y resurrección, nos abrió el camino hacia la salvación.
En Mateo 28:18-20 Jesús nos comisiona: “Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones…”. Esta Gran Comisión tiene un propósito mucho mayor, trasciende nuestra experiencia individual y nos vincula con la misión global de la Iglesia: extender las buenas nuevas de fe, esperanza y salvación a todos los pueblos de la tierra.
Ser y hacer iglesia implica un compromiso activo con la tarea misional de compartir las buenas nuevas de salvación a toda lengua y nación. Esta tarea forma parte de nuestro ADN. Sin embargo, la misión no involucra solamente a un ministerio o departamento específico; es transversal, lo que significa que involucra a todos los ministerios que se desarrollan dentro de la iglesia, donde cada miembro desempeña un papel vital.
Así como la misión es transversal, también debe ser simultánea. Esto quiere decir que la expansión del Reino de Dios se lleva a cabo de manera constante en múltiples contextos. Sin limitaciones de tiempo y espacio; por el contrario, estamos desafiados a movilizarnos simultáneamente desde lo local hasta lo global.
Este Mes de La Alianza, somos llamados a estar Comprometidos con la Misión, asumiendo la responsabilidad de orar fervientemente, dar generosamente y continuar formando, enviando, sosteniendo y cuidando a los obreros en todo Colombia y en el mundo.
En junio de 1923 llegó La Alianza a Colombia y se estableció desde entonces, por eso hemos seleccionado el mes de junio para conmemorar cada año el Mes de La Alianza; en donde celebramos lo que somos, una familia Aliancista apasionada por llevar la luz de Cristo en palabra y hecho a todos aquellos que viven sin esperanza; y lo que hemos logrado inspirados por el amor de Jesús y empoderados por su Espíritu Santo.
Desde la Dirección Nacional hemos dispuesto una serie de recursos y actividades que cada una de nuestras sedes pueden llevar a cabo en sus celebraciones presenciales y virtuales durante el mes de junio, teniendo una guía que les permitirá adaptar esta campaña al contexto de cada iglesia.
Todo el mes de junio, haciendo mayor énfasis en los fines de semana, donde llevamos a cabo nuestras celebraciones familiares. En esta ocasión, cada semana estará enfocada en celebrar nuestros 101 años haciendo discípulos. Inspirando a cada miembro de la congregación a no solo ser un creyente, sino también ser un discípulo que apacienta las ovejas.
Para este Mes de La Alianza te invitamos a crear una serie de bosquejos para tu iglesia local que respondan al enfoque de cada semana, haciendo un llamado a la acción a favor del evangelismo y discipulado, basados en Mateo 28:16-20 DHH “16 Así pues, los once discípulos se fueron a Galilea, al cerro que Jesús les había indicado. 17 Y cuando vieron a Jesús, lo adoraron, aunque algunos dudaban. 18 Jesús se acercó a ellos y les dijo: —Dios me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. 19 Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones, y háganlas mis discípulos; bautícenlas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, 20 y enséñenles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Por mi parte, yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo”