Cuando disponemos nuestro corazón para ayudar a quien lo necesita Dios se mueve de manera sobrenatural y siempre es Él quien hace la obra y abre las puertas necesarias para cumplir su propósito.
El llamado de ayuda de las comunidades afectadas por el invierno en el departamento de Chocó llegó hasta nuestra sede Betel en la ciudad de la ciudad de Bogotá donde una familia de la iglesia se dispuso para donar 1000 bolsas con 6 litros de agua potable para las familias de Lloró, sin embargo existía la dificultad logística para hacer llegar esta ayuda hasta el lugar.