En una amena conversación, ‘Marcos’ nos contó que le gusta que lo llamen por su nombre en español, porque como él mismo dice es un colombiano con fachada de gringo. Aunque llegó a los 3 meses de edad, y en sus primeros años aprendió hablar inglés con algo de dificultad, creció con identidad colombiana por lo que se siente más cómodo hablando español y con nostalgia recuerda el sabor de unas ricas empanadas vallunas y un buen sancocho.