El Buen Samaritano
Cuando nuestro Señor Jesucristo inició su ministerio aquí en la tierra desarrolló una interesante estrategia de comunicación con sus discípulos, utilizando historias creadas en su mente pero planteadas de forma real ante sus seguidores para que a través de cada relato ellos pudieran imaginarse una realidad y aplicarla a su vida cotidiana.
Esto relatos conocidos como parábolas se han replicado en muchos sermones y prédicas haciéndose muy conocidas entre nosotros, una de ellas es el Buen Samaritano, que al oír su nombre inmediatamente traemos sinónimos a nuestra mente como la generosidad o la compasión.
Pero además del emotivo relato que nos brindó Jesús en Lucas 10:30-37, nos lanzó un gran desafío y por medio de esta enseñanza fuimos llamados a suplir las necesidades de nuestros semejantes de una manera totalmente incondicional y sin esperar recompensa alguna.
¿Pero cómo hacerlo? Realmente es una pregunta que podría ser obvia dentro de la realidad en nuestro país, ya que solo basta con levantar la mirada hacia el lugar donde Dios nos ha puesto como embajadores de su Reino y ver que hay muchas personas que viven necesidades físicas y emocionales a causa de su necesidad espiritual.
Estas situaciones requieren de personas dispuestas a poner en acción lo que hemos aprendido de Jesús en sus parábolas.
El programa de obra social desarrollado desde nuestra sede en la ciudad de Neiva bajo el nombre de El Buen Samaritano, se ha dispuesto a realizar la enseñanza de esta parábola asumiendo como propias las necesidades de todos aquellos a los que han logrado llegar durante 11 años de trabajo, utilizando esta estrategia como herramienta de evangelización.
Una de las tantas labores de amor y compasión que realiza este ministerio consiste en un viaje realizado anualmente en cabeza del pastor Daniel Peña, hacia municipios y veredas alejadas en el departamento de Huila y el macizo colombiano, allí cada diciembre se dibujan cientos de sonrisas en los rostros de niños campesinos o indígenas que reciben regalos recolectados gracias a la generosidad de quienes apoyan y contribuyen a esta causa.
El pasado fin de año un importante evento de evangelismo y obra social tuvo cita en la comunidad de la vereda Río Negro en el municipio de Íquira, Huila, un evento que contó con obras de teatro para entregar el mensaje de Jesús y una entrega de regalos para dejar alegría en los más pequeños.
Es nuestra oración que Dios continúe levantando personas dispuestas a entregar el mensaje de salvación a través de ministerios de relación directa con los que sufren necesidades tanto físicas como espirituales, reflejando el amor del Padre con hechos y siguiendo de manera efectiva los ejemplos que nos dejó Jesús en su palabra.
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