Mujeres Aliancistas Del Pacífico

En la Región Pacífico se vive y se predica la palabra en medio de una cultura y un contexto muy diferente a lo que acostumbramos en otras partes de Colombia, allí se encuentra un grupo de Mujeres Aliancistas apasionadas por la obra de Cristo, sorteando diferentes obstáculos para cumplir la misión.

En el municipio de San José del Tapaje, Nariño, se llevó a cabo el Congreso Regional de Mujeres Aliancistas, del 22 al 24 de julio, un evento que contó con distintas actividades, conferencias y talleres bajo la misma temática de Un Corazón Tan Puro Como El Oro, la cual se desarrolló en el Congreso Nacional Resplandece 2016, a principios del mes de julio.

En esa ocasión, muchas mujeres de la Región tuvieron que quedarse en casa con el anhelo de asistir al Congreso Nacional en la ciudad de Armenia, debido a la lejanía y los altos costos, ya que esta distancia requiere un tiempo estimado de 20 horas de viaje por mar y tierra, pero gracias a la voluntad de Dios, la palabra recibida en Resplandece 2016 navegó hasta las orillas del río Tapaje para ser de bendición a 218 mujeres provenientes de al menos 18 poblaciones de este sector.

El desplazamiento por el río brinda una experiencia paisajística única al mezclarse la cultura con la naturaleza en pequeños caseríos, permitiendo reflexionar en el tiempo y los recursos que implican desarrollar la obra misionera en estos lugares, de los cuales muchos han sido profundamente transformados por el poder del evangelio.

En la noche del viernes 22 de julio se dio apertura al evento con altas expectativas, las cuales se vieron reflejadas en un derroche de alegría y un corazón dispuesto para recibir el mensaje de la palabra. El hospedaje se dispuso en las instalaciones del templo, que al estar muy cercanas al río Tapaje les permitió disfrutar y realizar actividades en los espacio de receso y esparcimiento. En la noche del sábado hubo espacio para conocer los talentos de las Mujeres Aliancistas del Pacífico, quienes participaron con dramatizados cargados de emotividad por medio de los cuales enseñaron historias de la Biblia como la de David y Abigail, desafiando a las mujeres en su vida personal y ministerial, además de un tiempo de alabanza con mucho júbilo al compás del currulao, ritmo autóctono de esta región, dirigido por un grupo de músicos que ministraron con mucha pasión y actitud.

Para la clausura la noche del domingo se vistió de gala para brindar una cena especial como despedida, en este espacio todas las mujeres pudieron desfilar su mejor traje resaltando la elegancia y la belleza de la mujer del pacífico. De esta manera cerraron con broche de oro un fin de semana lleno de alegrías, bendiciones y ánimo, para embarcarse al día siguiente en cada una de sus lanchas para retornar por el río Tapaje a sus lugares de origen.

Es de gran motivación poder ver a estas mujeres vivir una experiencia ministerial en su propio contexto, permitiéndoles ser parte del desafío hacía lo que Dios quiere hacer con las Mujeres Aliancistas, mujeres que expresan su fe con pasión y efusividad, extendiendo el mensaje de Jesús hasta lo último de Colombia y transformando vidas con Un Corazón Tan Puro Como El Oro.