Viajes Misioneros 2017

Nuestro ADN misionero nos permite cada día crecer en la búsqueda de la dirección de Dios para realizar su obra en aquellos lugares donde la necesidad de un mensaje de amor esta latente y está a la espera de personas dispuestas a reaccionar y ejecutar el llamado de un discípulo de Cristo.

Durante la Semana Santa y con el propósito de resaltar el verdadero mensaje y significado de esta fecha, en distintos puntos de nuestro país se desarrollaron actividades misioneras que recordaron la obra de Jesús y el verdadero significado de su ministerio aquí en la tierra, con el mensaje de redención.

En la Región de Mecusab un grupo de 6 personas visitó la comunidad de La Victoria, ubicada en el departamento del Meta a tres horas de Villavicencio, en donde habita el resguardo indígena Piapocos, una comunidad que ya ha sido alcanzada con el evangelio pero que requiere capacitación en la formación de sus propios líderes y su mayor interés es plasmar el conocimiento de la palabra en las próximas generaciones.

Allí con un gran trabajo en equipo se realizaron actividades propias de la comunidad como ayudar en los quehaceres diarios para entrar en confianza y ser bien recibidos por la comunidad; y fueron precisamente este tipo de espacios los que permitieron dar un mensaje de amor a los indígenas.

En otros espacios hubo capacitaciones a los maestros de niños para que puedan utilizar métodos didácticos para enseñar la palabra, con las mujeres se utilizaron las manualidades para enseñar cómo Dios realiza el proceso de sanidad y restauración, además hubo tiempo para teatro, canciones y manualidades donde estuvo presente el plan de salvación.

Con los jóvenes tuvieron el privilegio de tener tiempos significativos para charlar y realizar actividades deportivas, fogatas y ministraciones. Además, por medio de la alabanza se pudo predicar y ministrar a esta comunidad, siendo de gran bendición e impacto para muchas vidas.

De la Región Valle partieron desde la ciudad de Buenaventura para tomar la cuenca del río Cajambre en el Pacífico colombiano, visitando en varios grupos las poblaciones de Humanes, Silva, San Pablo, Chirrinchao, Punta Bonita y San Isidro; en estas dos últimas no había presencia de alguna iglesia cristiana y gracias a la misericordia de Dios alrededor de 70 personas pudieron aceptar a Jesús en sus vidas.

En las poblaciones visitadas, donde habían sedes de La Alianza, se dio la oportunidad de ministrar al liderazgo, dándoles fortaleza y haciéndoles sentir acompañados de la familia Aliancista, demostrando la unidad del cuerpo de Cristo. También se dictó la Escuela de Formación Integral para sumar nuevas personas al ministerio de cada proyecto misionero.

En las riberas del río Cajambre Dios está respaldando firmemente el crecimiento del evangelio, muchas iglesias están creciendo integralmente, nuevos templos están siendo edificados y otros tantos reformados, el crecimiento del cristianismo en este lugar es una evidencia de la gracia de Dios, en todo el trayecto de este viaje misionero cerca de 145 personas aceptaron a Jesús.

Dios continúa preparando obreros para salir al campo a predicar la palabra, y estas salidas le permiten a los futuros misioneros identificar y desarrollar estrategias efectivas para acceder y predicar la palabra en distintos contextos; brindándoles herramientas que empoderan su proceso de preparación para continuar en unidad realizando la gran tarea que Dios nos ha delegado, a fin de llevar esperanza de salvación hasta el último rincón.

Fotos: Hector Niño y Carlos Solis