Hace dos años el pastor Anatol Martínez de nuestra sede en Algeciras Huila se percató que parte de la congregación que venía los domingos asistían cada mes o cada dos meses, esto generó inquietud en él y su esposa Nidia Rivera: ¿Por qué se da esta situación? ¿Por qué estas personas solo pueden asistir cierto tiempo? Fue así como se dieron a la tarea de conocer más las necesidades de estos creyentes, conocer desde dónde venían y en qué sector vivían.

En los países con acceso restringido al evangelio cada vez nos es necesario tener nuevas plataformas que nos permitan tener un acceso legítimo y una obtención de recursos económicos que posibiliten de igual manera financiar las misiones. Gracias a este pensamiento La Alianza a nivel mundial ha venido trabajando en un esfuerzo mancomunado por incluir a los hombres de negocios y profesionales en la misión. Por ello del 28 al 29 de abril se celebró en Chile el Primer Congreso “Negocios como Misión”.

“¡Ay mi Tolima!” Es el nombre del capítulo 15 del libro Pasando la antorcha, que narra cómo desde 1932 empezó La Alianza a crecer en el Tolima; ¡Ay mi Tolima!” también es parte de la letra de un bambuco de esta región; y ¡Ay mi Tolima!”, expresa esa compasión que ha tenido por años el Rev. Dagoberto Chilatra, quien es oriundo de este departamento y se ha dedicado a bendecir a través de la oración e impactos evangelísticos a las iglesias del sur del Tolima. 

“…¡Entonces seremos un coro, no solo nuestras voces, sino nuestras propias vidas cantando en armonía en un himno asombroso al Dios y Padre de nuestro Maestro Jesús!” Romanos 15:3-6 (MSG). Esta fue la palabra lema que Dios entregó a los 130 participantes de Hablemos Alianza 2022 para ser Artistas en Armonía.  Del 22 al 24 de abril, los ministerios artísticos de la iglesia local (alabanza, diseño, audiovisual, producción, danza, teatro, entre otros) recibieron una capacitación teórico-práctica para ser equipados e inspirados en el desarrollo logístico de la iglesia, fortaleciendo así el llamado que Dios ha hecho a cada uno para servir, pues el quehacer solo se convierte en arte al estar en las manos de Dios y ser direccionados por su Espíritu Santo, entendiendo que es necesario trabajar en conjunto los unos con los otros con una plena convicción de que no se puede servir estando solos, sin olvidar que todo es para la gloria de nuestro Padre Celestial.

Eran las 4:50 de la tarde del lunes 11 de marzo, el sol estaba descendiendo, el calor estaba presente y el ambiente se sentía húmedo, pero en el corredor de la casa del A. B. Simpson en Leticia, Amazonas ya se encontraban los 15 participantes de la Escuela Nacional de Misiones. Era un viaje de misiones corto pero lleno experiencias, capacitación y entrenamiento misionero donde cada participante iba a explorar las implicaciones y los desafíos que enfrentan nuestros misioneros en el campo, y su vez identificar las oportunidades de servicio en la que ellos se podían involucrar.

El pasado jueves 31 de marzo el ministerio de Hombres Aliancistas tuvo su primera reunión virtual a nivel nacional llamada “Respondo al llamado”, basados en Jueces 6:12 “Y el ángel de Jehová se le apareció, y le dijo: Jehová está contigo, varón esforzado y valiente”. A pesar de los obstáculos y dificultades causados por la temporada invernal, que limita la conexión en diferentes regiones del país, más de 250 hombres entre ellos una gran participación de pastores, respondieron al llamado donde pudieron socializar acerca del ministerio de Hombres Aliancistas y compartir sus testimonios de vida a través de diferentes metodologías como los grupos virtuales.

En todo el mundo, las personas luchan por ganarse la vida en la pandemia, una iglesia está respondiendo a esta lucha proporcionando a otros un camino hacia el trabajo por cuenta propia. Durante los últimos siete meses, La Alianza Hechos de Vida de Colombia ha estado organizando sesiones sobre emprendimiento para aquellos que desean crear su propia pequeña empresa. El proyecto Emprendiendo Sueños se ha venido desarrollando en las áreas de Cali y Buenaventura.

El año pasado realizamos junto a nuestras sedes la “Ofrenda de Fin de Año · Enciende tu luz”, por segunda vez teníamos el objetivo de unirnos en amor y generosidad para contribuir al quehacer de la iglesia local por medio de una ofrenda especial que les permitió a más de 100 sedes realizar una jornada de impacto a la comunidad. ¿Pero cómo una ofrenda nos permite ser luz?